
Ya tengo decidido donde vamos a ir este año de vacaciones, al complejo San Alfonso del Mar, en Algarrobo, Chile. Tiene una piscina que ostenta el record Guinness como la mayor piscina de agua cristalina del mundo. Una extensión de más de 1 km. de largo, ocho hectáreas y 250 millones de litros de agua. ¿Difícil de imaginar? Nada menos que 6.000 piscinas familiares de 8 m. de largo.

Además de su gran tamaño, la laguna tiene una característica espectacular: sus aguas tienen la transparencia y el intenso color turquesa de los mares tropicales, gracias a una avanzada tecnología desarrollada por la empresa Crystal Lagoons que permite captar el agua desde el océano y mantenerla en perfectas condiciones. Pero eso no es todo: además en verano mantiene una agradable temperatura que llega a los 26ºC, nueve grados más que la temperatura del mar. El éxito y exclusividad de esta tecnología ha permitido que Crystal Lagoons esté exportando su known how a importantes proyectos inmobiliarios internacionales.

Para su construcción se destinaron 200 millones de dólares y en su mantenimiento se gastan 4 millones de dólares anuales. El proyecto fue desarrollado por el bioquímico y empresario chileno Fernando Fischmann, fundador de la compañía Crystal Lagoons.
De esta manera en San Alfonso se logra lo increíble: sentir que se disfruta del mar del Caribe estando en la costa central de Chile.
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